“Esto se torna más complicado, por el simple hecho de no tener un concepto claro, preciso y conciso”
¿Y
SI HABLAMOS DE DIFICULTAD DE APRENDIZAJE?
Rocío
Rodelo Pérez
En varias
ocasiones, todos, o casi todos, hemos escuchado hablar de dificultades de
aprendizaje, en la escuela mayormente. Los maestros usan mucho la frase “es que
su hijo sufre de dificultades de aprendizaje porque nunca entiende lo que yo
digo”; pero, en realidad ¿qué serán las dificultades de aprendizaje? Lo más
común que pensamos es que es un problema que tienen los alumnos para aprender.
Y sí, puede que sí sea cierto. ¿Qué te parece si hablamos de las dificultades
de aprendizaje? Te aseguro que juntos aprenderemos de este gran tema.
No se tiene un
concepto o definición universal para este término, pero lo que puede decir (a
lo que sé) es que se trata de un problema, que algo está ocurriendo en el ser
humano que está impidiendo que el alumno aprenda. De acuerdo con algunas
definiciones, se dice que las dificultades de aprendizaje son problemas
persistentes en la adquisición de habilidades fundamentales como la lectura,
escritura, razonamiento de problemas o matemáticas y habilidades sociales. Y
así como esa definición, existen muchas más. La pregunta aquí es ¿cómo buscamos
o en dónde nos basamos para comprender esta situación? Pues bueno, se dice que
es por medio de las evaluaciones a dichas dificultades y al modelo de
intervención reeducativa, pero ¿Qué quiere decir eso? Cuando se usan los
instrumentos para evaluar el aprendizaje de los alumnos, sólo se usan para
etiquetar a los alumnos y decir “tú sí aprendiste” o “tú no aprendiste”, pero
¿Cuándo se han utilizado para saber el desarrollo que ellos han tenido? Porque
sí, considero que para eso deberían de utilizarse, para poder saber en dónde
batalla o se le dificulta más.
De acuerdo con mi
querido amigo Vygotsky, los procesos de aprendizaje tienen que ver con nuestro
contexto social, con nuestro alrededor; todo lo que sucede en nuestro entorno
tiene un impacto en nuestra vida y en diferentes ámbitos. En cuanto a la
intervención, hay que saber realmente qué está pasando, saber de dónde proviene
el problema, para poder saber de qué manera el maestro puede intervenir. ¿Difícil?
Demasiado. Y dicen que los maestros tienen el trabajo más fácil. Ojalá fuera
así.
Lo que un maestro
puede hacer cuando se presente una dificultad de aprendizaje en uno de sus
alumnos es acompañarlo en todo momento, crearle un espacio e intervenir
pedagógicamente desde el plano de la metacognición. Sí, muy bonito y todo, pero
son muchos tecnicismos, en especial, el último. En serio, sólo de escuchar
“metacognición” me da miedo, se trata del propio conocimiento del aprendizaje;
dicho en otras palabras, saber cómo aprendo. Es un proceso muy complejo y que
muy pocos logran desarrollar o entender.
Hasta aquí, nos
hemos dado cuenta de que hablar de dificultades de aprendizaje es algo muy
complejo, que hay mucho que decir y muy poco a la vez; pero si eso les pareció
mucho, prepárense para lo que viene. En la actualidad, el enfoque
constructivista tiene una presencia muy fuerte en la educación, pero es una
presencia buena; dicho enfoque se interesa por el aprendizaje previo y lo que
van construyendo, junto con su entorno y las experiencias vividas, hacen que se
reconstruya ese aprendizaje. De acuerdo con el enfoque constructivista, la
manera en la que los alumnos construyen su aprendizaje, da pie para identificar
las diferentes formas de aprender y, entonces, comprender el por qué se
presentan dificultades de aprendizaje.
Y bueno, es así
como llegamos al final de esto, no sé si con un pensamiento más amplio o más
revuelto del concepto de dificultades de aprendizaje. Y es que ¿sabes qué? esto
se torna más complicado, por el simple hecho de no tener un concepto claro,
preciso y conciso. Y me atrevo a decir que los expertos deberían de trabajar en
una reconstrucción del concepto, pero basado en las teorías de aprendizaje que actualmente
se usan en la educación. Y cuando eso se logre los profesionales de la
educación lograrán identificar, diagnosticar, enseñar, mejorar y motivar la
vida de la persona que sufre dificultades de aprendizaje.
Comentarios
Rocío, tienes mucha razón en todo tu relato, pero más en la síntesis que haces al final. “Esto se torna más complicado, por el simple hecho de no tener un concepto claro, preciso y conciso”. Y es verdad, se habla y se dice mucho, pero se hace poco en realidad para atender los problemas en el aprendizaje. No hablemos de trastornos, sino de simples problemas cotidianos que nadie parece interesado en resolver en los escenarios educativos, sean éstos familiares o escolares. Por eso es más que pertinente la pregunta del título de tu relato: ¿Y si hablamos de dificultad de aprendizaje? Es algo que urge.
Saludos, José Manuel Frías Sarmiento
Saludos
Compañera Rodelo, su texto llega al verdadero corazón de la práctica educativa, al verdadero lugar de la esencia educacional; al aprendizaje. Como usted bien lo afirma este asunto es muy complejo si definirlo lo es, ahora practicarlo, el asunto se complica. Se advierte buen capital teórico en su escrito, me gustó mucho eso de su amigo Vigotsky, eso por supuesto marca tendencia y preferencia en usted.
La felicito.
Le mando un abrazo desde Los Mochis.
Adán Apodaca