"Yo, a veces, no tengo dinero ni para el desayuno de mis dos hijas que van a la secundaria"
LA SEÑORA LORENA Y YO
José Manuel Frías Sarmiento

Yo vivo en una casita en las orillas de Culiacán, allá más allá de la Ampliación Pemex. Y no tengo más que dos cuartos en los que vivimos todos; mi esposo, yo y mis cuatro hijos: tres mujeres y un varón.
2. La Señora Lorena tiene una camioneta Mercedes muy grande y muy bonita para llevar a Gerardito a su escuela, que le queda a como a tres cuadras de su casa.

3. La Señora Lorena estudió una maestría en el Tec de Monterrey. y aunque no trabaja, tampoco le ayuda a su hijo con las tareas, porque para eso contrató a una profesora que le ayuda todos los días a repasar las clases y a hacer bien sus tareas. Y siempre saca diez.
Yo nomás llegué a tercero de primaria y aparte llego muy tarde a la casa, a planchar los uniformes y a hacer la comida para cenar. Y mis hijos hacen a cómo pueden sus tareas. Mi marido tampoco sabe nada de la escuela. No como el de la Señora Lorena, que es Arquitecto y funcionario de gobierno. Y con que mis hijos pasen de año en la escuela ya me doy por bien pagada.
4. La Señora Lorena le compró a su hijo dos computadoras, una grandota que tiene en el estudio y otra más chiquita que lleva a la escuela en su mochila. Y en ellas su profesora particular le busca la información y los videos que necesita para cumplir con sus tareas.
Yo apenas saqué fiadas en la Coppel las dos mochilas para las que van a secundaria, y las que ellas dejaron se las pasaron a los de la primaria. Y mi comadre Chita me ayudó con las libretas que se perdieron en una papelería del centro en la que trabaja. Y, para saber lo que no sabemos de las tareas, a veces le preguntamos a Don Tacho, el de la tienda, cuando va Lupito por los huevos y el litro de leche, porque él siempre se lleva leyendo.
5. La Señora Lorena tiene una sala con una televisión muy grande en la que su hijo, ahora que dan clases en la casa, mira en la mañana las clases de la SEP, y por las tardes las repasa con su profesora particular.
6. La Señora Lorena es muy buena y quiere mucho a Gerardito, pero yo la miro que se desespera cuando le pregunta cómo se escribe una palabra o cómo se saca una cuenta. Le dice que le hable al celular de la profesora particular, que para eso le paga, para no batallar ella.
Yo, aunque supiera, no les puedo ayudar a mis hijos con las tareas, ni me pueden hablar para preguntarme porque la Señora Lorena me tiene prohibido agarrar mi celular mientras trabajo en su casa.

Yo, con apuros, nomás le pongo saldo al celular de mis hijas que van a la secundaria para que les tomen fotos a las tareas de todos y se las manden a sus profesores. Pero quién sabe cómo las hagan y cómo las manden. Dice la más grande que las fotos no se miran bien porque les faltan pinceles o algo así, la verdad no le entendí, pero el caso es que les falta color y calidad. Eso dice ella.
8. La Señora Lorena es muy elegante y parece que todo le sale bien. Ella dice que Dios la tiene bendecida con el amor de su esposo y con el maravilloso hijo que Diosito le mandó. Y que como ellos son ricos no se van a contagiar del coronavirus, porque para eso le pagan a gente que haga las vueltas que ellos necesitan. Y así ellos se quedan en su casa, como lo pide el gobierno.
Yo soy una de las gentes que hacen lo que la Señora Lorena necesita para no salir de casa. Y mi esposo, como apenas es media cuchara, también tiene que salir a trabajar. Y mis hijos tienen que ir a comprar a la tienda y a las tortillas para hacerse su comida. Y a todos nos puede pegar el coronavirus, porque no podemos quedarnos en casa, como lo pide el gobierno.
9. La Señora Lorena me dijo ayer que su esposo, como es funcionario de gobierno, le dijo que ya estamos en Fase 3 y que ya no venga gente a trabajar a la casa y que mejor todo lo pida por teléfono.
10. La Señora Lorena me despidió.
Comentarios
La señora Lorena y yo. Hay más yo, que Lorenas.
Hoy celebro el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor. 23/abril/2020
“Un niño de 5 años que ha perdido a su madre entre la muchedumbre de una feria, se acerca a un agente de la policía y le pregunta”
¿No ha visto a una señora que anda sin un niño como yo?
Gabriel García Márquez
Lo saludo con mucho gusto Profesor Frías..Luz Cristina...
Te sigo felicitando como siempre lo he hecho por tu incansable espíritu de escritor; hoy lo vuelves a demostrar con este cuento que, muy al estilo del Realismo Mágico del Gabo compartes con nosotros ¡. Felicidades, adelante esperamos más cosas tuyas.
ATTE Rigoberto Ríos.