“Ya le eché el ojo a esos tacos de carne asada, a esa machaca y esos tamales de puerco junto con esa agua de Jamaica”
LA FERIA DE MI PUEBLO
Jorge Rayel Victoria Quirino
Los
días más esperados del año han llegado, los preparativos para conmemorar un año
más de la fundación de mi pueblo están listos, toda la gente está emocionada, no
por el evento sino para estrenar sus mejores outfits que encargaron por Shein.
Ahorré todo el año completo para gastar a lo desgraciado en chucherías, en
realidad sólo tengo $70 pesos que pude ahorrar, ya sólo faltan que anuncien a
los artistas que se presentarán; ¡qué emoción! espero que el gobierno este año
por fin tengan contratado a los Temerarios.
Una
misa de acción de gracias no caería mal asistir para honrar a nuestros
antepasados que fundaron el pueblo donde vivo, pero es requisito asistir para
poder acceder a la muestra gastronómica que están preparando para después de
misa, ya le eché el ojo a esos tacos de carne asada, a esa machaca y esos
tamales de puerco junto con esa agua de Jamaica.
El sol se oculta poco a poco, eso indica que
la noche y la fiesta está a punto de iniciar, artistas regionales, concurso de
belleza, danza folclórica, hacen su presencia levantando los ritmos y ánimos de
las personas asistentes, cuando en realidad solo apartan su lugar para escuchar
a su artista favorito que se presentara al final de la noche, todos preparados
con sus hieleras llenas de cerveza, tequila, vino, mezcal, tonayán, refrescos,
wiski, thinner, cloro, todo lo que aloque hasta salir bien ahogados, claro que
no se olviden los hielos aunque estemos a 10°C.
Más
allá del escenario están los puestos de comida donde no cae mal cenar un
pozolito para bajar el alcohol que ingerí o más bien unos tacos con mucha
salsa, pero para que todo amarre algo dulce como unos algodones de azúcar con
tal de coleccionar esos billetes que están dentro de la bolsa, pero si no es
suficiente un tostiesquite en la madrugada para seguirle con el paseo.
Veo el
juego mecánico más grande de la feria donde te sube a los aires colocándote de
cabeza a punto de desmayarte, donde solamente pagas $100 pesos para subirte y
que se te baje la presión, donde tu vida dependa de esas tablas de madera que
se encuentran sosteniendo el juego, por el cual no me subo ya que yo sí mire la
película destino final 3, mejor me subo a los caballitos.
Quién
lo diría, disfrutar estos días la feria de mi pueblo con su comida tradicional,
arriesgas tu vida, disfrutas los fuegos artificiales, te engentas, esos tenis
que estrenaste terminan llenos de polvo porque bailaste mucho con la banda, ese
peinado que tanto te costó termina mojado porque te echaron espuma
accidentalmente, esas pestañas que te pusiste se te cayeron todas en el juego
mecánico, disfrutas los fuegos artificiales y te vas a tu casa bien feliz con
tus amigos a las 5 de la mañana realizando esas mismas actividades por 3 días
consecutivos, eso sí, que las risas no falten.

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