“En las noches me canso de volar y volar, vez tras vez, no encuentro una solución, persigo un sueño hecho de humo que no logro descifrar”
ÁNGELES EN LA CIUDAD
Marité Ibarra
Cayendo
con la luz del día cubierto de rojo, con el cuerpo mojado y desnudo, con frío y
temblando, yo me pregunto ¿quién me mirará caer? Siento vergüenza, mis alas me
delatan, pero como ángel en estado natural encuentro una ciudad.
Persigo
cada rayo de luz cuando estoy abierto ante el dolor y la desesperanza, sé que
no es una ilusión pasajera, identifico a los demás que, como yo, se encuentran
disfrazados caminando en la ciudad. Mis alas se extienden gloriosamente, quiero
volar, mirar todo desde arriba, y esconderme entre las nubes de fuego.
La
gente llora de nuevo sin encontrar una salida y yo sólo vuelo sin cesar,
buscando algo que nadie ha encontrado jamás, algo enterrado en el fondo de la
humanidad. No hay manera que nadie me reconozca, tengo que encontrar otro
camino para regresar, para poder volver o ¿simplemente ése es mi destino, caer
mil veces…?
Cuál es
el sentido de permanecer, no lo sé, mientras tanto al igual que los demás,
camino por la ciudad y entre gente normal me confundo. En las noches me canso
de volar y volar, vez tras vez, no encuentro una solución, persigo un sueño
hecho de humo que no logro descifrar.
No
entiendo mi posición, sigo confundido con pensamientos erráticos entre la
ciudad y los cielos. Las imprecisiones son comunes entre ángeles en la ciudad,
se cruza la realidad con la fantasía, producto del implacable azar. Envidio a
los humanos que poseen la capacidad de auto sanación, porque en nuestro caso,
los corazones no actúan según la lógica.
Me resigno
a permanecer en la ciudad y en un interés repentino y humano, ahora comprendo
que las naranjas no son las únicas frutas que hay, así que guardo mis alas para
otro momento, puedo decir algo auspicioso mientras escucho el tiempo pasar,
pero prefiero no hacerlo.
Volar
ya no será mi prioridad, enredarme entre sábanas blancas como parte de un
proceso es lo que debo seguir haciendo, entre gente común seguiré andando,
seguiré silbando y con las manos en los bolsillos caminaré en las calles hasta
adaptarme a ellas, mientras tanto, una cálida ciudad me acoge hasta encontrar
mi verdadero destino…

Comentarios
Saludos, José Manuel Frías Sarmiento
Me gustan mucho las palabras de su comentario, profe acaso habrá ángeles en este Blog?? Eso no lo sabremos,...
Seguiremos leyéndonos mientras tanto!!
Le.mando un gran abrazo!!!
Saludos, un abrazo. Tu amigo, José Manuel Frías Sarmiento
Seguimos comentándonos profe!!! Saludos igual!!
Esa cancion de Alejandra Guzmán nunca me ha gustado Porcella, de hecho nunca me gustó su voz ronca, sólo una canción se la paso, Rosas Rojas...
Muchas gracias por leer y comentar este texto!!
Ya sabes que me gusta mucho que me comentes.
Seguimos en contacto compañera de parranda literaria!!! Saludos!!!
Yo le agradezco infinitamente su tiempo para leerme y comentar.
Seguimos en contacto compañero literario!!
Muchos saludos para usted desde la región de Évora!!
Ciao!!
Saludos compañera.
El tema de los ángeles es muy controversial ya que hay muchas opiniones al respecto, pero es interesante saber lo que piensan los demás!!!
Te agradezco y seguimos en contacto compañero de parranda. Te mando un gran saludo!!
Gracias por sus palabras y por estar presente con su opinión al respecto.
Un enorme saludo le.mando hasta los Mochis!!!
Muchas gracias por tu comentario compañero, en Culiacan sí hay muchos ángeles pero malignos, que abusan de su poder para amedrentar a los indefensos.
Gracias por hacerse presente aunque tenga retardo!!!
Te mando un gran gran saludo!!!