“La evolución de la palabra escrita ha sido una revolución silenciosa, pero profundamente transformadora”






 

EL INFINITO EN UN JUNCO 


Carolina León Valdez

Empezaré reflexionando qué nos quiere decir Irene Vallejo con este título. Así empezó una clase el Maestro Frías. Hubo un gran silencio en el salón al escuchar lo que él nos comentó. Inició así: El "infinito" hace referencia a la inmensidad del saber humano y cómo éste ha sido transmitido a lo largo de los siglos; mientras que el "junco" evoca la planta utilizada en el antiguo Egipto para fabricar papiro, uno de los primeros soportes del libro. Luego pidió a una compañera que leyera un párrafo de una página, en donde habla de Alejandro Magno y cómo su sed de fama lo llevó a conquistar ciudades y dejar su huella en el mundo, como quien quiere que su nombre perdure para siempre. Es fascinante ver cómo Alejandro, obsesionado con héroes de la mitología como Aquiles, no sólo soñaba con ser como ellos, sino que hizo todo lo posible por superar sus hazañas. En sus conquistas y fundación de ciudades, veo el paralelo con los libros: Alejandro dejó su nombre grabado en la historia, así como los libros nos permiten grabar ideas y recuerdos para las generaciones futuras.

Irene Vallejo también nos recuerda que los libros no siempre fueron accesibles como hoy, durante siglos sólo unos pocos tenían el privilegio de leer y escribir. Los rollos de papiro y las primeras bibliotecas, como la de Alejandría, eran tesoros reservados para aquellos con poder y riqueza. Pensar en esto me hizo reflexionar sobre lo afortunados que somos hoy en día, cuando cualquier persona puede tener acceso a miles de libros con un simple clic. Esta evolución es parte de la magia que Vallejo logra transmitir: la evolución de la palabra escrita ha sido una revolución silenciosa, pero profundamente transformadora.  Lo que sentí al ojear, El Infinito en un Junco fue una mezcla de admiración y gratitud, por el poder de las palabras y los libros para conectar a los seres humanos a través del tiempo. El Infinito en un Junco no sólo me hizo valorar los libros como objetos físicos, sino también como guardianes de la memoria y de la imaginación humana. Me dejó con una sensación de asombro al darme cuenta de que, aunque las personas pasan y las civilizaciones cambian, las palabras y las historias tienen el poder de sobrevivir, de conectar y de transformar. En cada página, El Infinito en un Junco me recuerda que los libros y la historia no son entidades separadas, sino que están entrelazadas. Cada conquista, cada batalla, cada ciudad fundada es también parte de una historia escrita, preservada y contada una y otra vez. Este libro me deja una profunda reflexión sobre el poder de las palabras para trascender, para conectarnos con nuestros orígenes y, al mismo tiempo, para inspirar nuestras acciones futuras.


Comentarios

Tejer las narraciones, las experiencias, las labores de la mujeres del ayer, del presente. La presencial y sus importantes contribuciones a lo largo de la historia, de acuerdo a Irene Vallejo la mujer tiene un papel necesario en la vida social, cultural, económica, política … en la búsqueda de saber se encuentra grandes e interesantes conocimientos…

Saludos

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