“Buenos días, ¿quién es el último para sacar ficha? Yo. Entonces voy detrás de usted"
¡COMPRA LIBRETAS!
(Dos
camaradas y otra voz)
María Luisa Álvarez Piña
Dos
camaradas platican mientras esperan el turno para pasar a consulta médica en La
Unidad de Medicina Familiar. No, yo no me dejé. A mi hermano yo lo miraba, en
aquel tiempo todos se morían por COVID. No, sí estuvo feo. La pandemia está
volviendo más agresiva, no ves qué comen los chinos, de allá vienen todos esos
virus, por eso son tan flaquitos, esos comen lo que encuentran, arañas, ratas,
perros, caballos a de cuenta un venado para ellos.
Ese día
sí me molesté, nunca vengo al ISSSTE y me negaron la chingada cita y le dije:
doctor lo siento mucho, aunque usted sea nuevo aquí, bueno, relativamente, pero
ha de tener cinco años, nombre le dije muchas cosas, pero nunca los ofendí,
nada más las señalaba que eran unas rateras, se roban medicamento, (otra voz) hasta
los mismos doctores llevan su cajita. Alguien les tiene que decir y no creo que
sea el único que les ha dicho eso, por eso ni se espantaban, una decía no le
haga caso, una me dijo traiga pruebas. No vamos muy lejos la maestra de aquí
enseguida, cuántas veces le has apartado cita, aquí delante de nosotros (otra
voz) muy cierto. Es que todo mundo sabe que hacen eso y más, pues me dio coraje
y me molesté ¡oye desde las cuatro cinco de la mañana estar aquí! En tiempo de
calor como quiera, pero en tiempo de frío, un frillazo que hace, es qué las
injusticias que hacen. Y el Dr. Meza nomás agachaba la cabeza, la verdad. ¡No
entiende señor que no hay ficha! ¡cómo no, oiga hay como diez gentes que le van
a dar! Una más para mi esposa, pa venir juntos.
No se
puede, el sistema no lo permite. ¡No, no, no, qué sistema! El sistema lo
mueven. Si entiendo le dije. Ya el lunes vine calmado y le dije: antes que
nada, discúlpenme por la acción que yo hice, deben entender porque lo dije. La
señora güera la que estaba gordita, ahora está flaquita (otra voz) Angélica se
llama, dijo no se preocupe Don Ramón aquí todo mundo nos regaña, haciéndose la víctima
y más vergüenza le da a uno que a ellos. Lo siento mucho Dr. pero en ningún
momento les dije groserías, nomás las señalé. Por eso no quieren a Obrador;
exactamente, no quieren quitar la corrupción. Bola de bandidos, estaban privatizando.
Ya lo había privatizado (otra voz) nos venden a nosotros. Así es, como esclavos
(sonríen). En los hospitales los mismos políticos rentaban las camas, ¡cobrando
renta por eso! Negoció López Obrador para sacarlos a la chingada.
Oiga,
en las últimas ocasiones que fui a México a las Pirámides me tocó que cobraban
los primeros años como en el 78, 80 cinco pesos y la última vez que fui me
cobraban 150 pesos la entrada algo así y le dije a mi hermana ¿y esto por qué?
Y me responde ¿no sabes? No, es que esto ya no es del gobierno ¡aaah canijos! Es
qué la concesión se la dieron a particulares y por eso cobran lo que cobran. Aquel
amigo está sacando material para llevárselo a Estados Unidos y también quiere
negociar con ellos. Ya se los quitó, no están en pláticas, ahí están los
manglares es un ecosistema de hecho, está negociando el viejo, ¡no pues si se
los va a quitar! Se los quiere comprar por la buenas, quiere recuperar. Mucha
gente no se da cuenta de eso, la plebada no sabe nada de eso, no pues no están
familiarizados con la política, no les gusta. Pero ya les gusta, por el billete
que les llega de la beca, ¿pero para qué te pongas uñas y pestañas? ¡trae
frijoles, arroz para llenar el buchí!
(otra voz) ¡Compra libretas!
Buenos
días, ¿quién es el último para sacar ficha? Yo. Entonces voy detrás de usted.
Comentarios
Estimada María Luisa, el diálogo cotidiano, el coloquial, enriquece el habla y fortalece el idioma y las relaciones personales. Nos vuelve más humanos y nos integra al contexto en el que vivimos.
Saludos, José Manuel Frías Sarmiento
Gracias por compartir las simplicidades de la vida.
Saludos