30 de abril, Día del Niño ¡Felicitaciones!

 “A esa edad somos todos paganos, y a esa edad somos todos poetas. Después el mundo se ocupa de achicarnos el alma” 

 

MIRADA DE NIÑO

(Feliz Día del Niño y de la Niña)

 

María Luisa Álvarez Piña

 

Me crucé con una nenita chiquita que debía tener dos años, no más de dos, que venía brincando en sentido contrario, y ella venía saludando al pasto, a los pastitos, a las plantitas. «Buen día, pastito», decía, «Buen día, pastito». A esa edad somos todos paganos, y a esa edad somos todos poetas. Después el mundo se ocupa de achicarnos el alma.                                                                     Eduardo Galeano

 

Quizás usted ya ha leído o ha escuchado por qué dejamos de ser niños cuando se es adulto. Por qué dejamos de sorprendernos, sobre las pequeñas cosas con asombro, alegría: observar a las hormigas sobre el camino trazado como soldaditos cargando varitas, hojas a su hormiguero. Saltar una y otra vez los charcos color chocolate que se forma tras la lluvia. Tocar los gusanitos peludos sobre de maleza o postrado sobre el vaivén de las hojas verdes. Seguir a las mariposas amarillas que invitan a dar pequeñas vueltecitas. Ver al caracol con la lentitud y tras ocultar su cuello-cabeza. A las tortugas en tierras áridas, que también esconde su cuello-cabeza. A las luciérnagas entre los arbustos formando una pequeña ciudad llena de luces. A las cigarras de colores revoloteando, a los bombillos verde metálico... Se va acabando poco a poco tener la observancia de niño. Fijar más la atención por qué existe, porque se van y luego están de nuevo con menos presencia en las diferentes estaciones.

Mientras que la cotidianidad esconde la imaginación y un mundo infantil que sorprendió sin darnos cuenta que el asombro era asombro. Entonces, siendo hoy 30 de abril Dia del Niño me sumerjo en la mirada y voz de Domingo y Juan Y Medio|25 años de Canal Sur Televisión.

D: Cuando venía pa´ ca, vi casi todo del monte pelao, seco, seco, seco.

J: ¿Y por qué?

D: Algunos estaban con un poco yerba, pero lo demás ¡todoo seco! Sequísimo.

J: ¿Entonces no se deben tirar colillas?

D: ¡NO! Ya ves que otros se van de campi, y van comiendo, los niños juegan. Y entonces pa cuando comen así, así, hacen fuego, ya cuando comen ya se van y dejan el fuego ahí, y se va más y más fuego hasta que parece poo todo campo. Y ahora tiene que llegar los policías, los aviones, los helicópteros, los bomberos, todos pa apagal y se llegal talde todo quemao.

J: Muy bien dicho.

D: (Muestra su cajita de animalitos de juguete) a estos también los matan para hacer piel, a estos así de pequeños los matan, desde lejos ¡passs! Otros con flechas, muetos.

J: Domingo eres el tipo más simpático que he conocido en mi vida. Creo, que te sabes alguna canción.

D: Dos, una te la canto entela y ota a la mitad. La de los patitos en el agua,  y del señol gato, cual quiere plimela de las dos.

J: He oído por ahí que has dicho, que yo soy tu mejor amigo.

D: Sí

J: (Se lleva ambas manos a los ojos, al no poder contener el llanto) algún día me va a dar algo en este programa, te lo dijo en serio. Que cosas pasan en la tele, ¿aguatas aquí al público un momento?

D: Sí

J: Eres tan guapo (se acerca Domingo dándole dos besos en la mejilla. Se levanta, camina mientras limpia sus lágrimas).

D: (Observa a Juan al caminar hacia quien sabe dónde, con mirada de niño)