"¿Por qué tenemos que llegar a esos límites? Correr bajo techo a las 11:59 porque alguien más, muchos más, van a salir con armas como si fueran a la guerra"

LLEGAN LAS FIESTAS DECEMBRINAS 

Sophia Alexandra Velázquez Mendoza 

Llegan las fechas decembrinas en todo el mundo, y no sé qué costumbren tengan en otras ciudades o países, pero en Culiacán son fechas muy pesadas y un tanto bélicas.

De manera muy general se esperan con ansias estas fechas porque la familia y las amistades se unen para pasarla juntos en un rato de buena convivencia, el alcohol abunda por aquí, en la mayoría de los hogares, y no está demás tomarse algunos tragos, sentirse de alguna forma conectados unos con otros.

Aunque pareciera meme cuando dicen que el día 24 y 31 son los días en que las familias salen de pleito, dónde los terrenos, las casas, los cuidados se reclaman o refieren, noches en donde hay casas a las que les falta un vidrio en el ventanal pero sacan una gran arma, parece zona de guerra llegando las 12.

Cuando era pequeña pasaban muchas cosas que no entendía, supongo que así vivimos de niños y esto ya es cultura, que de pronto estamos conviviendo amenamente en el patio de algún hogar o simplemente a la intemperie cuando de pronto alguien empieza a alzar su voz para todos por la hora y decir “¡Todos para adentro!”, de pequeño se mezclan muchos sonidos en esos 3 minutos, de las 11:59 p.m. a las 12:01 a.m., uno de pequeño no entiende por qué no le dejan ver los juegos artificiales, ve a sus familiares gritar por lo que parece alegría, de pronto ves gente en la calle, carros que pasan a una velocidad en la que pareciera que vuelan y la hora perfecta de un infante, la hora de los regalos.

Cuando menos te lo esperas alguien junta a los menores y los encierra, algunos se percataron y otros no, algunos lloran o gritan, creen que esta pasando algo malo mientras los más inocentes pueden pensar que los juntan para dormir, pero esta confundido con los gritos de desespero de otros pidiendo a sus padres o por el bien de ellos ¿entonces qué sucede afuera?

Las fechas decembrinas nos ponen alegre porque la familia se une, toda la familia se une por una o un par de noches, por sus posadas, noche buena y navidad, o el recibimiento de un nuevo año, pero todo esto se cubre con un manto rojo cuando las personas sacan su coraje, y no es necesario que beban alcohol o ingieran alguna sustancia tóxica, hay personas que son como Chernobyl por naturaleza, más bien por traumas, su pasado, problemas que nunca arreglaron.

Estos Chernobyl se convierten en bombas como Little Boy o Fat Man, transforman y destruyen todo a su paso en fechas tan especiales, lo peor de todo es que sus alrededores lo ven como algo normal, tan normal que después se van a estar riendo mientras curan la herida de alguna de las personas, mientras algunos familiares deciden irse en medio tiroteo por huir de las bombas, mientras esperan en la sala de urgencias para atender un mal golpe o se ríen después de llar a un entierro.

¿Por qué tenemos que llegar a esos límites? Lo vemos como algo normal, dónde una familia la pasa sanamente y luego tener que correr bajo techo a más tardar a las 11:59 p.m. porque alguien más, muchos más van a salir en armas como si fueran a la guerra, porque vemos tan normal que las mismas personas siempre hagan una escena y estamos esperando el momento de unirnos o la pasamos con el temor de ver la hora de partida. Son fechas dónde las personas se unen y quieren pasar un buen rato, pero en Culiacán a más de uno les roban una sonrisa y a otros hasta una vida