“Resulta que los culichis justo vamos saliendo de la cueva y la civilización es algo nuevo para nosotros”








7 TIPS PARA VIAJAR EN CAMIONES CULICHIS Y NO MORIR EN EL INTENTO


Andrea Berrelleza


Todos los días es una tremenda travesía la que emprendo cada vez que me voy a trabajar, o bien, también cuando voy a ir a determinado lugar y no tengo quién me dé un raite: viajar en camión urbano. La mayoría de los que no tenemos un auto para desplazarnos de un lugar a otro, tenemos que acudir, sin pretextos, al uso de los camiones urbanos. Esto es, por sí solo, de hueva; pero aunado al comportamiento bestial de los conductores (o camioneros) y al calor proveniente del mero infierno que hace en esta ciudad, el viaje en camiones urbanos se torna interesante y se convierte en una travesía de la que muchas veces podemos platicar con alguien más y compartir las experiencias camioneras que nos dejan.

Salir todos los días de mi casa y tomar dos camiones para ir a mi trabajo y después tomar otros dos para regresar a casa, me ha hecho pensar que debería haber algo así como un manual para el uso de estos transportes, cuyo eslogan nos dice Sonríe Más Seguido (cosa totalmente ignorada porque con unos camiones como ésos, un servicio como el que la mayoría nos da y un tránsito citadino tan saturado como lo es el de Culiacán, es difícil sonreír más seguido). Es por ello que me he dado a la tarea de buscar y compartir: Siete tips para viajar en camiones urbanos culichis y no morir en el intento.

1. 1.- Intentar hacer una fila antes de subir. Resulta que los culichis justo vamos saliendo de la cueva y la civilización es algo nuevo para nosotros, y al momento de abordar un camión, es más lógico y más cómodo hacerse bola en la puertita de subida que hacer una fila. Las filas no son nomás para los niños de preescolar que siguen a la maestra como un “gusanito”, ¡las filas pueden salvar vidas!... Bueno, quizá en un camión urbano, no, pero sí sería grandioso hacer una fila antes de subir y no competir por ser primero; hacer una fila, implica que todos la respeten, así que se rompen las reglas si alguien llega a meterse delante de nosotros.

2.   Alistar el dinero para pagar. Para agilizar el tiempo en subir y acomodarse en un asiento, es de gran ayuda tener el dinero listo en la mano para pagar y no esperar a estar frente al camionero para sacar el monedero y buscar peso por peso hasta completar el precio del pasaje. Y es mejor si se paga la cantidad exacta para que no retrasar cuando vaya a regresarse el cambio. Para los estudiantes sería bueno que también alistaran sus credenciales que las escuelas les proveen. Y hablando de estudiantes…

3.   Si eres estudiante de secundaria o de bachillerato, por fis, no grites. No es cállate, sólo no grites. Quizá estás en la búsqueda de tu personalidad, de tu identidad y necesitas atención de quienes te rodean, pero no es necesario gritar o reírte a carcajadas. ¿Sabes? Los camiones son lugares cerrados y el sonido se encierra, lo que hace todavía más odiosos tus gritos y carcajadas. Realmente a nadie le importa si te encuentras en esa búsqueda, los demás sólo queremos un viaje tranquilo, y más cuando la faena de nuestras labores deja sus estragos en nuestros cuerpos.

4.  4.- Ceder el asiento de la ventana. Sabemos que los asientos vienen en pares y hay uno hacia el pasillo y el otro pegado a la ventana. Ceder el asiento al lado del pasillo y sólo moverse hacia al que está a la ventana, es fácil. Pero ceder el lugar de la ventana es más complicado, hay que mover las piernas hacia el pasillo, ponerse de lado para darle espacio a la otra persona para que pase hacia el otro asiento y al mismo tiempo intentando no rozarse el uno con el otro. Aquí es donde es preferible ponerse de pie para dar el pase, así se evitan incomodidades de roces o de algún golpe accidental. También se considera ponerse de pie cuando la persona del asiento de la ventana va a bajar.

5.   Prepararse para bajar. A la hora de bajar del camión, sería bueno comenzar a prepararnos para la bajada, más o menos, una cuadra antes; si se traen bolsas o mochilas, tomarlas, levantarse del asiento y acercarse a la puerta y oprimir el botón o anunciar la parada del camión para bajar cuando se llegue el momento. Esto también es con el fin de agilizar el tiempo. Y es más recomendable cuando el camión viene muy lleno, porque pasar entre tantas espaldas y traseros, retarda el tiempo del camión detenido.

 6.- Bajar por atrás. ¿Por qué tanta insistencia en bajar por adelante? Es algo sistemático: subimos por adelante para pagar y bajamos por atrás, simple. ¿De verdad es tan difícil? Es un verdadero problema que quieran bajar por la puerta de adelante cuando hay gente queriendo subir; tamos’ viendo que nadie hace fila, y todavía hay quien se atreve a ir en sentido contrario entre el cúmulo de gente. ¿Es mucho pedir respetar que la bajada sea por la puerta trasera?

 7.- Y lo más importante: por favor, ¡pásenle pa’ atrás! La parte de atrás del camión no es una puerta al Infierno, ni tampoco un hoyo negro, no hay cholos, ni ladrones, ni secuestradores, así que no hay qué temer pasarle para atrás, mejor eso a quedarse hechos bola en la parte delantera y en medio del camión. Hasta los garbanzos se quejan: una vez me tocó escuchar a uno que dijo: “¿por qué tendrán esa maña?” (la de quedarse amontonados en la parte delantera).


No soy quién para decirle a la gente qué hacer o cómo funcionan las reglas sociales, pero no es difícil usar la lógica y desenfrascarse del egoísmo para entender que hay ciertos comportamientos que mejoran algunas situaciones de vida y la vida en general, y todo se relaciona a empatizar y pensar un poco en los demás.

Éstos fueron los siete tips que, de mi parte, son aportados para promover un mejor comportamiento social culichi. ¿Habrá alguno más que debería ser agregado a la lista?


Comentarios

Andrea, un rasgo de humor en estos tiempos difíciles que vivimos, siempre será bienvenido. Además de que nos presentas una rápida viñeta de cómo actuamos los culichis en ciertas situaciones.

Saludos, José Manuel Frías Sarmiento
agao dijo…
Andrea, que padreee! tus sugerencias que yo que ando en camión se de lo que hablas, totalmente deacuerdo, en esos 7 pasos a madurar jejejje y aparte creo que los camioneros te lo agradecerían, jajajaja,pobres muchachos oye lidiar con trafico y aparte con la gente jejeje, yo la verdad procuro siempre adelante porque me ha pasado cada cosa en medio, que dije, no me vuleve a pasar jejejje, y procuro no subirme cuando van retacados, me ha tocado asta ir sentada en el cofre y pues nooo, termine un día, ayudándole al camionero a cobrarle y me dije tampoco me vuelve a pasar, no por no cobrar el chico se porto bien aparte se carcajeaba de mi, porque le dije tu maneja sin renegar y yo cobro ya te imaginarás jejejje
Te felicito por tu valentía de escribir y tu buen sentido del humor.
Saludos
Adaena Quevedo
Marcelo Tolosa dijo…
Excelente, bien señalado estimada Andrea. Fíjate que estoy de acuerdisimo con lo que mencionas. Todos los puntos que redactas es lo mismo que he observado y es la solución que me ha venido en la mente. Pero la que mas me llama la atención es el numero dos. Se me hace super arcaico la manera en que se administran, pero con la experiencia del conductor se la rifan , es super rapidísimo para ir atendiendo al que le falta un peso, al que esto y otro, y de manera rápida.

Otra cosa que me gustaría proponer, y claro, no tiene porque ir en tu escrito.

Pero hacia los conductores de a lado. Muchas veces en un camión vienen 20 0 30 personas y tiene que batallar en pararse o en seguir una ruta por culpa de un conductor que nomas viene una persona en el carro y por mala educación , estorba, e interrumpe el tiempo de esas 20-30 personas.

Saludos.
Gracias por publicar, leer, comentar y compartir las perspectivas que tenemos sobre este tema. Es una situación de la vida diaria, muy común y también muy de nosotros, es nuestra cultura, aunque a veces no nos guste.

Saludos.

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