Yo no sé si a alguien he ayudado en su desarrollo personal y cultural. Y temo no saberlo nunca



 



YO NO SÉ...

 

José Manuel Frías Sarmiento

 

Yo no sé qué padre he sido y soy. Yo no sé qué maestro he sido y soy. Yo no sé si a alguien he ayudado en su desarrollo personal y cultural. Y temo no saberlo nunca. Tengo inquietud por la incidencia de mi trabajo educativo con miles de alumnos que han compartido conmigo una parte de su vida en las aulas, en las que creo, sólo creo y a veces lo creo más, hemos crecido juntos, aunque fuere siquiera un poquito. Pienso, también, en mi actitud como padre de una joven Comunicóloga y de un joven Ingeniero Industrial que ya vuelan con sus propias alas, aunque a veces cambien su rumbo y retornen al nido que cobijó sus anhelos y les brindó las bases para su educación. A veces, como canta Espinoza Paz, siento que hago y que hice las cosas bien y me llega un poco de satisfacción; pero, a veces, también, observo y pienso en los miles de jóvenes a los que no alcancé a comunicar mi pasión por la Cultura, mi placer por la Lectura ni mi convicción de que Escribir, Hablar y Compartir, nos haría ser mejores Humanos en Relación Social, Familiar o Educativa. No lo pude hacer y eso me preocupa porque no sé si podré hacerlo con los que pronto irán a buscar una parte de su educación en las charlas en las que yo convierto mis clases y que a muchos de ellos parecen aburrirles, por ser, a su parecer, sosas y fuera de contexto. Del Contexto de ellos, tan distante del nuestro, pero tan cercanos en las consecuencias culturales para ambos.

Sé que soy de la Generación que ha vivido muchos cambios y navega todavía en la transición de un mundo que no sé manejar tan bien como ellos lo hacen, al ir y venir por espacios digitales, de una a otra plataforma que les resuelve por instantes el trajín de su vida que corre por metaversos y contextos llenos de avatares y de simulaciones virtuales que se confunden con las reales, en un maremágnun innovador en el que muchos de ellos sólo saben manejar, con cierto éxito, botones y pantallas sin alcanzar a comprender con certeza de dónde viene y para dónde van los que las hicieron posible y controlan todo su accionar.

Y yo de eso, creo que nada sé.

Comentarios

Estimados lectores, les saludo con afecto y les comparto una muy corta y muy personal reflexión.
Saludos, su amigo José Manuel Frías Sarmiento
Yo no sé. Una reflexión que conlleva más que saber, sentir. “Yo no sé” en la filosofía zen,
budismo, Osho, meditación, metafísica … solo Vive.
En la educación, formación, cultura, transformación personal y profesional y eso es la que mucho.

Saludos
Marité Ibarra dijo…
Las dudas y la incertidumbre es lo que mantienen al pensamiento ocupado y en estado de alerta... yo sé que usted sí sabe!
Estimada María, lo que hagamos será siempre muy poco, si lo ganado se desvanece cuando a los demás no les interesan ni los lograos culturales que logran con su talento; si las autoridades no valoran el esfuerzo y el interés y ve como con desdén lo que se hace por la Cultura; si los propios actores y protagonistas culturales se enfadan y dejan de producir.
Por eso es no se sabe con certeza qué se logra con o que se hace.
Saludos
Jesús Tamayo dijo…
Excelente reflexión maestro, me recuerda mucho a mis inicios en la docencia en Choix y mi empeño por distribuir la cultura en cada sitio. Tarea difícil. Las cosas buenas a veces nos cuestan, es parte de la vida.

Gran escrito, gracias por compartirlo con nosotros.

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