
“Sin saber por qué, me resistí a creer que su vida sólo fuera llegar a la Universidad, pasear, saludar, dar clases e irse a su casa. Aquella mirada tan misteriosa es por alguna razón” FRÍAS 007 Kimberly Elizabeth Maturín Lezama Un viento fuerte azotaba en la ciudad. Formaba grandes y esponjosas nubes grises, llenas de agua en espera, al parecer, de que algún bonito colibrí llegase y las pinchara, para soltar la lluvia que refrescara con suave y deliciosa brisa a las personas que descansaban fuera de sus hogares. Camino a la Universidad, se podían ver pequeños charcos en las calles y pequeñas gotas seguían cayendo, pintando figuras en la calle como si de un lienzo en blanco se tratase. Al llegar, se podía ver un pequeño grupo de muchachas platicando y riendo a carcajadas, ¡que alegres se miraban!, pero no se encontraban solas, a su lado se encontraba un hombre de espaldas, con una pequeña taza de café negro, sin azúcar quizás, acompañado de un pequeño libro cuyo título resa...